Queríamos emociones fuertes, picante en la cita mexicana y poco hemos tardado en tenerlo. Si el torneo ya se había quedado en parte en cuadro con varias ausencias, ahora hay otra dupla de favoritas, de grandes candidatas que, a las primeras de cambio y sin posibilidad de réplica, ha dicho adiós.
Se trata de Gemma Triay y Martita Ortega, quienes partían como números 1 pero quienes no eran capaces de superar el entramado táctico y defensivo de Claudia Fernández y Victoria Iglesias. Las cuatro se midieron en un partido trabado, peleado, de alternativas varias que tuvo una primera manga muy igualada hasta el tramo final, dejando un 5-7 para la madrileña y la andaluza, jugadoras que hasta el momento no le habían perdido la cara al encuentro.
Sin embargo, la reacción de las chicas de Rodri Ovide fue fulgurante y cambió su versión de juego por completo en el segundo set, pasando al ataque y vaciándose en la anotación para conseguir un rápido y amplio 6-1.
Tras empatar, llegaría el final de fiesta en el que nuevamente las fuerzas se igualaron dejando un goteo constante de puntos y juegos que parecía llevar a ambas duplas a la muerte súbita. Sin embargo, Iglesias y Fernández se apoderaron de los últimos minutos de juego y con algo más de claridad de ideas abordaron el barco de Triay y Ortega haciéndolo naufragar (5-7, 6-1 y 4-6) y mandándolo de vuelta a España en su primera navegación por tierras mexicanas.
Después llegaría otra batalla imperial con Jimena Velasco y Noa Cánovas, quienes parece que a pesar de haber eliminado en 1/16 a Mapi y Majo Sánchez Alayeto se quedaban con ganas de más y ante Araceli Martínez y Sara Ruiz, tirando de una versión resiliente hasta el extremo, le dieron la vuelta a un tie break con no uno, sino otros dos parciales iguales.
Araceli y Sara dominaron el tramo final de la primera manga, en el que hay más miedo a fallar que intentos por acertar y en el desempate se erigieron como la pareja más segura en la dispar suerte que suele repartir; no obstante, lejos de bajar los brazos, Velasco y Cánovas tiraron de la experiencia cogida el día anterior y del gran crecimiento que llevan esta temporada para anotarse dos tie breaks más en los dos siguientes sets, convirtiendo así el partido en una pelea numantina en la que ninguna bajaba los brazos y que se fue más allá de las tres horas de juego.
El resultado lo dice todo, un 7-6, 6-7 y 6-7 larguísimo en el que las cuatro se llevaron un merecido reconocimiento por parte de los asistentes, pues salieron totalmente vacías del 20×10.
Bea Caldera y Ana Catarina Nogueira ampliarían la nómina de sorpresas del día, llevándola a dos encuentros, con su victoria frente a Lucía Sainz y Patty Llaguno con cierto margen especialmente en el segundo envite (4-6 y 2-6), mientras que Alejandra Salazar y Sofia Araújo estuvieron más acertadas si cabe y consiguieron un 6-2 y 6-2 en detrimento de Patricia Martínez y Águeda Pérez.
Tamara Icardo y Virginia Riera ganaron con igual amplitud de marcador y los registros idénticos (2-6 y 2-6) a Lucía Martínez y Carmen Goenaga mientras que, necesitando remontar, Vero Virseda y Claudia Jensen fueron capaces de sacar adelante su encuentro frente a Carolina Orsi y Carla Mesa.
Tras llevarse la española y la italiana el set inicial con la mínima ventaja posible, desde la reanudación el choque fue un monólogo para Virseda y Jensen, más metidas y efectivas en sus acciones, sin tantos errores y llevando por completo el peso del partido, lo que se reflejó en el 6-4, 2-6 y 1-6 final.
Mientras, Aranza Osoro y Jessica Castelló superarían con un 6-3 y 6-4 a Marta Talaván y Nuria Rodríguez y, para terminar, con paso firme, seguro y muy poderoso, Bea González y Delfi Brea dejaban fuera de la cita mexicana a Carolina Navarro y Marina Martínez con un 1-6 y 3-6 que demuestra la diferencia que hay ahora mismo entre las primeras parejas del ranking y las que vienen por detrás.
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