Ya avisamos en la previa que venían con la flechita hacia arriba y que, probablemente, estaban en su ‘primer’, en el mejor momento de la temporada, y lo han vuelto a demostrar.
José Jiménez y Maxi Sánchez Blasco habían dejado por el camino a los nº1 y a los nº3 y se veían con la dupla nº4 en la gran final, Álvaro Cepero y Javi Garrido, claros favoritos por ranking y nombre, pero ni el español ni el argentino se amilanaron, y presentaron batalla.
Un choque sumamente completo que nos regaló tres parciales, y el primero ya avisó desde el primer minuto lo que nos iba a ofrecer: golpes en todos los lados, pocas o ninguna opción para marcar diferencias y dominar a placer. Los cuatro jugadores daban su mejor versión y sus mejores golpes para acabar decidiéndose todo por pequeños detalles, favorables en esta ocasión a Jiménez y Sánchez (6-4).
Reacción de categoría del gaditano y el cordobés, demostrando favoritismo y buena conexión en la pista a pesar de no ser pareja habitual, especialmente en el caso de Garrido, que en este final de temporada ha demostrado una gran mejoría. Gracias a ello, él y Cepero lograron venirse arriba, romper y certificar luego su saque para imponer el empate con un 3-6 y dejar todo para el tercero.
Allí las tornas cambiaron y resurgieron Jiménez y Sánchez, impidiendo que la remontada rival llegase a su totalidad; esta vez serían ellos los que romperían el servicio rival para adelantarse tímidamente y luego certificar el golpe, dando la estocada final y escribiendo un 6-4, 3-6 y 6-3.
Esto dejaba a Maxi con su sexto título de la temporada, todos en este circuito, y el tercero para José, que cierra 2025 con un triplete más que positivo.
En la parte femenina no hubo discusión. Las grandes favoritas, Aranza Osoro y Claudia Jensen, a pesar de ser su primera gran prueba juntas, demostraron galones y enorme calidad en la pista para arruinar todas las ideas de Martina Fassio y Patty Llaguno, pareja nº2 del torneo.
Las dos argentinas llevaron la manija del encuentro desde el principio y tras una primera entrega en la que sí hubo oportunidades para los dos lados de la red (6-4), en la segunda pusieron la directa y no hicieron prisioneros, fue un golpeteo constante. Arruinaron cualquier intentona de Patty y Martina y terminaron levantando el título de campeones con un 6-4 y 6-2.
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