Se presentaban en la finalísima del complicado y antiquinielas torneo de Burdeos dos parejas que en ningún momento aparecían con ciertas opciones de llegar al último duelo, pero ahí estaban, fruto de la suerte y de los méritos propios, si bien el premio gordo iba a ser solo para dos de ellas.
La final era inédita y citaba a Sofia Araújo y Andrea Ustero a un lado, y a Carmen Goenaga y Bea Caldera al otro, juventud unida a talento y cierta experiencia en la figura de la portuguesa, buscando todas ellas, como pareja, su primer título en Premier Padel.

Empezaron las hostilidades con ciertos reparos, caminando las cuatro sobre seguro, intentando fallar lo menos posible y arriesgando lo justo salvo una, Araújo, que ya sabía lo que era coronarse y que empezó campando a sus anchas y metiendo presión en el bando enemigo. Así consiguió, junto a Ustero, poner un parcial demoledor a su favor (5-2); sin embargo, la maquinaria de Goenaga y Caldera arrancó y funcionó a las mil maravillas como desde principios de semana, y gracias a ello consiguieron apretar el luminoso (5-5), pero ahí se terminó su resistencia.
Dos juegos más para el binomio hispanoportugués debido a errores de nervios por parte de Carmen y Bea fueron el detonante para que la primera manga se fuese al banquillo de la pareja nº4 esquivando además el tie break (7-5).
La reacción de las españolas contó con un elemento diferenciador: la consistencia. Se dejaron los errores en la caseta, olvidados, y empezaron a jugar y a creérselo, con soltura y recursos, para obtener un parcial de 2-5 que fue una losa para Andrea y Sofia, demasiado desdibujadas en este segundo set y cediendo con un amplio 2-6.

Pero las tornas, una vez más caprichosas, del pádel, quisieron pasar la alternativa al otro bando y tras el recital de las dos jóvenes, serían Ustero y Araújo las que llevarían la voz cantante en el tramo final. Break para parar en freno la reacción rival y decir «aquí estamos», siendo ahora ellas las que manejaban el timón con soltura y con otro gran parcial (5-1), a pesar de un contrabreak que pondría un ligero toque de emoción, acabarían por reinar en suelo francés (7-5, 2-6 y 6-2) tras casi dos horas y media de pelea.

Un título que convierte a Andrea Ustero en la jugadora más joven en alzar metal en Premier Padel, contando con 18 años, 2 meses y cuatro días. El pádel sigue derribando barreras de precocidad y seguro que no será la última.