Como ya os hemos contado en el apartado femenino, la lluvia ha sido muy caprichosa y paraba en varias ocasiones el discurrir normal de la jornada, lo que suponía favorecer a unos y perjudicar a otros, alterando los planes de los jugadores.
Eso sí, no impidió que antes de suspenderse todo, apareciesen actores con los que a priori no se contaba y que pusieron ese punto de locura en la sesión.

Los primeros en abrir la lata fueron Miguel y Nuno Deus, pareja que se ha convertido en sinónimo de efectividad y regularidad y que cuando están inspirados pueden aguarte el día. Se encargaron de imponerse, con un juego muy serio y completo, a Javi Ruiz y Gonzalo Rubio en dos parciales sin margen y peleados (7-6 y 6-4).
Después, seguiría el sueño de Fran Ramírez y Adam Axelsson al superar otra prueba y conseguir ganar también en el cuadro final, en este caso a Aris Patiniotis y Nacho Sager. El español y el sueco demostraron que lo ocurrido en previas no fue fruto de la casualidad y que también en batallas largas encuentran premio.
Sorprendieron con un inicio demoledor a Aris y Nacho (6-1) para después ver cómo crecían estos y les daban réplica, más por empuje y convicción que por dominio, pues el marcador del segundo acto estuvo muy ajustado (4-6) pero se convirtió en síntoma de lo que pasaría después.

En el tercero se mantuvo la igualdad sin que nadie diese su brazo a torcer ni abriese distancias; los breaks no terminaban de allanar el camino a ninguna pareja y así decidieron irse al desempate, donde Ramírez y Axelsson sacaron un punto extra de acierto para coronar un nuevo paso adelante (6-1, 4-6 y 7-6).
Ale Galán y Fede Chingotto vencieron sin problemas a Álex Chozas y a ‘Sanyo’ Gutiérrez (6-1 y 6-3), mientras que los ‘Mágicos’, Gonzalo G. Alfonso y ‘Tolito’ Aguirre debutaron en la que va a ser su despedida como pareja, haciéndolo con victoria (6-3 y 6-4) sobre unos Fede Mouriño y Antonio Pincho’ Fernández que quisieron pero no pudieron llegar a conectarse del todo al partido.

Arnau Ayats y Pablo García Rodrigo lograron vencer a Luis Hernández y Enrique Goenaga, dos parejas que se conocen muy bien y que dejaron, especialmente en el segundo acto, un partido de ida y vuelta muy atractivo para el aficionado, con un juego vistoso, rápido y también con una buena dosis de recursos técnicos, para acabar con un 6-3 y 7-6.
Por último, Lucas Bergamini y Paquito Navarro vencieron a Juan Cruz Belluati y Pablo Lijó en un partido que bien pudo caer de cualquier lado, pues cada pareja resolvió su parte a base de zambombazos y juego de potencia, remates y explosividad.
Les fue mucho mejor a Paquito y Lucas en el inicio (6-1) pero luego el andaluz desconectó en parte, tirando más de mano que de movimiento en la pista, con malos síntomas en los banquillos y en el 20×10, pues en ocasiones no chocaba con su compañero, no se animaban y se perdían en demasiados errores no forzados. Aun así fueron capaces de llegar vivos al tie break, pero la insistencia de Belluati y Lijó obtuvo su merecida recompensa en forma de empate (6-7 (5-7 en la muerte súbita)) y les dio una vida extra.
Ese plus no lo lograron aprovechar del todo y en el tercero se impondría el control de Bergamini y la experiencia del sevillano en los momentos clave, sacando a relucir ahora sí un juego más combinado y fluido que les dio distancia y con ello margen para dominar (6-1, 6-7 y 6-3).